Llevo días escuchando, a los chavales del pueblo, que si vienen unas furgonetas de rumanos llevándose a los niños. Y dicen que en Diezma también están. El caso es que los niños ven a los rumanos pero los mayores no. Y así andan las cosas. Hemos pasado del hombre del saco a los coches misteriosos de rumamos secuestradores. Todo parte, al parecer, del caso de una niña desaparecida en Atarfe. La siguiente noticia (pincha aquí) da una idea de los síntomas en los que nos hemos visto sumergido y como ha desencadenado un rumor donde anda gente por los pueblos a la caza de niños desprevenidos. Para mayor inri, también lo he escuchado en Belicena, mi pueblo, que anda a unos 50 km. de La Peza. Y así cada uno va contando su historia. Para leer la noticia de la niña desaparecida en Atarfe pincha aquí.
La otra noticia que ha aparecido en el Ideal es la de una misteriosa cara en Diezma (pinchar aquí). Esta cara, cuentan, que es la de una mujer que murió hace tiempo con 18 años y que está pidiendo ayuda de esta manera. Habrá que ir por allí para constatar si es cierto o no. El caso es que no cuento con ninguna foto. Al parecer si ha aparecido en prensa y en televisión. Espero conseguirla para ponerla aquí. Lo que sí me ha contado una persona que estuvo en la subida al monte, es que hubo un percance significativo: subiendo, alguien de los que transportaba el santo tropezó, y éste al caer se partió la cabeza, quedando esta por un lado y el cuerpo por otro. Un San Blas, sin duda, cargado de incidencias.
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